miércoles, 16 de abril de 2014

POR SI TE QUEDAS EN LA CASA! Las 15 mejores películas cristianas de la historia para ver en Semana Santa. Accesa a YouTube

Con lo que nos gusta hacer listas, no podíamos resistirnos a ésta. No nos ha sido fácil seleccionar sólo 15 títulos de la rica filmografía cristiana. 


Inevitablemente faltan películas muy valiosas, no por deméritos, sino por las virtudes espirituales y cinematográficas de las que hemos seleccionado, que están ordenadas cronológicamente.


 
1928 | Carl Theodor Dreyer
Representación del injusto juicio al que fue sometida la Doncella de Orleans, excepcionalmente interpretada por María Falconetti, cuyo rostro vemos, en toda su expresión, sin maquillaje. Dirigida por el perfeccionista realizador danés Carl Theodor Dreyer, que desarrolló el film, principalmente, mediante primeros planos. La recreación de Juana en la hoguera y la fotografía son, sencillamente, sublimes. Una de las grandes obras maestras de todos los tiempos.
 
 
1946 | Frank Capra
El generoso George Bailey ha sacrificado sus sueños para servir a los demás. Un problema en el banco desde el que colabora con sus vecinos, le hace replantearse, dramáticamente, su vida. Clásico de Navidad que pone de manifiesto la importancia que tiene cada vida y el valor de dedicarla a los demás. Frank Capra trató un tema muy serio con buenas dosis de humor y una clara simbología cristiana. El resultado es redondo.

 
1947 | Maurice Cloche
Biografía de San Vicente de Paúl, que refleja el difícil contexto en el que le tocó vivir al santo, en una Francia azotada por la peste y con muchas carencias. También muestra la hipocresía de los ricos, de los que tuvo que valerse Vicente de Paúl para obtener recursos para los pobres. Prescinde de florituras para afrontar la historia de una manera realista y convincente. Gran papel de Pierre Fresnay dando vida al santo. Poco conocida.

 
1950 | Robert Bresson
El francés Robert Bresson, uno de los directores que más ha aportado al cine espiritual, adapta y dirige esta historia sobre las tribulaciones de un joven sacerdote ante el rechazo que sufre en su primer destino y la enfermedad que padece. El realizador galo, con su particular estilo austero e hiperrealista, se introduce en el alma del protagonista para diseccionar sus ilusiones y desalientos, en este film sobre la crisis espiritual de un sacerdote.

 
1953 | Alfred Hitchcock
El autor de un asesinato se confiesa con el sacerdote Michael Logan tras cometer un delito. Una serie de malentendidos hacen que las sospechas de la investigación recaigan sobre el confesor, que está obligado a mantener silencio en virtud del secreto de confesión. Con este punto de partida, Alfred Hitchcock desarrolla un thriller que ha aguantado muy bien el paso del tiempo, en el que traza un atractivo y sutil retrato de la figura del sacerdote.

 
1955 | Carl Theodor Dreyer
Johannes, considerado como un loco, critica el acomodamiento espiritual de los que le rodean, a los que interpela a vivir su fe de una manera más profunda y confiada. Cada uno de los personajes que aparecen tiene una postura diferente con respecto a la fe y se van desarrollando debates en torno a las creencias. Otra película de Dreyer, uno de los grandes del cine religioso que, con toda justicia, repite en esta lista.
 
 
1959 | William Wyler
Judah Ben-Hur rehúsa colaborar con su viejo amigo Messala en el sometimiento de los romanos al pueblo judío. Las desavenencias surgidas al respecto, unidas a un desafortunado accidente, los convertirá en enemigos irreconciliables. Cine con mayúsculas con una importante carga de valores cristianos, premiado nada menos que con 11 Oscar. Responde al género de romanos, muy habitual en los años 50 y principios de los 60, en el que la figura de Cristo aparece tangencialmente.

 
1964 | Peter Glenville
Recreación histórica de las disputas entre Enrique II y Becket, dos antiguos amigos que se enfrentan por la defensa de los intereses del Estado y de la Iglesia, respectivamente. Esta producción, principalmente británica, guarda muchas similitudes con Un hombre para la eternidad, estrenada dos años después. Richard Burton, en el papel de Santo Tomás Becket, aguanta bien el tipo ante un inconmensurable Peter O'Toole.
 
 
1966 | Fred Zinnemann
Premiada recreación de la vida de Santo Tomás Moro, un hombre íntegro que se niega a bendecir el divorcio de Enrique VIII que supone la separación entre la Iglesia de Inglaterra y la de Roma. Se desarrolla con un aire muy teatral y de manera rigurosa gracias al guión de Robert Bolt. Consiguió 6 Oscar, a la vez que dio a conocer la figura de Tomás Moro, quien puso sus convicciones y su confianza en Dios por delante de las tribulaciones a las que le sometió el rey de Inglaterra.

 
1986 | Roland Joffé
En las décadas de los 70 y 80 no abundaron las películas cristianas, pero entre ellas nos encontramos este largometraje, premiado con la Palma de Oro en Cannes. Conjuga su excelente artesanía -banda sonora de Ennio Morricone incluida-, con la profundidad de los dilemas de sus personajes, encabezados por dos grandes actores en plena forma: Jeremy Irons y Robert De Niro. Con el paso de los años se ha convertido en todo un clásico.

 
1987 | Gabriel Axel
Babette, una cocinera francesa, llega a una aldea de Dinamarca huyendo de la guerra en su país. Es acogida por dos hermanas que dirigen una temerosa comunidad cristiana que ha olvidado la alegría y recela de una gran cena de agradecimiento que organiza Babette. Poco se conoce de la filmografía de su director Gabriel Axel, aparte de esta cinta en la que combina los ingredientes con maestría para ofrecer un resultado delicioso.
 
 
1995 | Tim Robbins
La hermana Helen asiste a un recluso condenado a morir, lo que provoca la indignación de las familias de las víctimas del crimen por el que fue inculpado el preso. Este durísimo alegato contra la pena de muerte, basado en hechos reales, profundiza en el perdón desde una perspectiva cristiana. No se anda por las ramas a la hora de afrontar un tema tan escabroso, siendo ésta una de sus grandes virtudes. Lleva al extremo el mensaje de amor y redención de Cristo. Grandes interpretaciones de Susan Sarandon y Sean Pean.

 
2004 | Mel Gibson
Probablemente no sea la obra definitiva sobre Jesús, pero es la que más se ha acercado a serlo. Es una película clave del cine religioso, referencia indiscutible para las futuras adaptaciones de la vida de Cristo. Su excesiva violencia, aunque sin duda fiel históricamente, impide un relato más equilibrado. La exagerada polémica que se generó en torno a ella, impidió que se reconocieran virtudes como su buena realización -en la que destaca su fotografía-, el gran esfuerzo de Jim Caviezel o la composición del personaje de María.

 
2010 | Xavier Beauvois
Xavier Beauvois adaptó los verdaderos hechos vividos por una congregación de monjes en Tibhirine. Resulta sorprendente que un director agnóstico profundizase, de una manera tan genuina, en los valores espirituales y humanos de los monjes, que aparecen perfectamente definidos. El modo en el que se desarrolla el relato y el espíritu conciliador de los religiosos, dan como resultado una conmovedora película que supone, sin lugar a dudas, una de las cotas más altas del cine religioso.
 
 
2011 | Terrence Malick
Obra del personalísimo Terrence Malick, cuya difícil narrativa provoca fascinación y rechazo a partes iguales. Se trata de una cinta marcadamente religiosa que reflexiona sobre temas trascendentales para el ser humano, a través de la cotidianidad de una familia estadounidense de los años 50. El aparente silencio de Dios ante el sufrimiento, el modo de afrontar la vida y las relaciones familiares son el hilo conductor de este drama.