Ajuntamiento municipal de Barahona
por Ing. Rafael Matos Feliz/Tomado de El Biran NY
Estimados, lo primero que creo que han pensado es que tuve una
falta de ortografía al escribir Ajuntamiento. Pues no mis amigos; es que
se me ha ocurrido inventar cosas sin criterio como lo hacen en el
Ayuntamiento de Santa Cruz de Barahona. La palabra inventada quiere
hacer referencia a una junta de gente que se inventan las más absurdas y
descabelladas cosas para justificar la inobservancia de las normas y
evidenciar un desprecio por la sociedad de la que viven.
El pasado viernes 22 del presente mes de agosto se llevó a cabo
en la Sala Capitular del Ajuntamiento de Barahona una sesión para
someter una propuesta de instalación de una estación o bomba de
combustible en el malecón de la ciudad, para su aprobación o rechazo.
En realidad esa propuesta nunca se consideró ser rechazada por
los que forman el ajuntamiento, pues hacía varios días que los propios
empleados del ajuntamiento decían a boca llena que ya estaba aprobada e
incluso daban la cifra de 8 votos a favor de los 11 con que cuenta la
Junta, lo que quedó evidentemente demostrado por los infelices
“argumentos” que presentaron los ajuntados y otros defensores en defensa
de la bomba.
Uno de los distinguidos y honorables del ajuntamiento señaló,
con voz en cuello, que en la capital hay bombas en zonas residenciales y
en muchas partes y qué tanto es que aquí se oponen “al desarrollo”. Más
tarde dijo que ellos, los ajuntaos, no se llevan de nadie y que son
autónomos y que toman las decisiones como a ellos les parece. Según el,
se juntaron como partido para “apoyar la instalación de la bomba”
Lo de más arriba quiere decir que si en la capital viven violando y haciendo todo tipo de travesuras para instalar bombas, entonces por qué aquí no lo hacemos igual. En la otra parte establece que “los regidores” de un ayuntamiento no se deben a los munícipes y que sus decisiones no están basadas en el interés de la colectividad, sino en lo que les venga en ganas. Otro invento interesante, “esa bomba ahí crea desarrollo”. ¡Virgen Santa!
Otro distinguido y honorable de la misma junta, refiriéndose a
la Ley 317-72, que prohíbe la instalación de la bomba en el lugar
seleccionado, dijo que esa ley era vieja. Tras lo cual, hubo una
risotada de muchos de los presentes, al parecer apoyando la aberración
planteada. Este distinguido caballero, que de paso es ingeniero, tuvo el
tremendo ingenio de establecer que las leyes viejas no se cumplen ni se
les debe hacer caso. Yo me imagino al señor ingeniando para desconocer
la provincia Barahona, pues para nuestra desgracia y según el ingenio
del honorable, Barahona fue fundada por una Ley Constitucional en el
¡¡AÑO 1907!! Ay mi madre nos fuñimos. Ahorita desconoceremos la
República, pues es aún más vieja.
Un “defensor” de los presentes en la sesión que apoyan la
instalación de la bomba en el malecón frente al Parque Temático,
Educativo e Infantil, al argumentar a favor de la bomba dijo que allí
(al malecón) los que van son borrachones, demostrando con ello un
desprecio por los ciudadanos que disfrutan sus ratos de ocio en este
espacio, que fue creado para el esparcimiento.
Este último caballero, estaba defendiendo a “un amigo”
(¿político?) y no paró mientes en poner su “amistad” por encima del bien
de la colectividad e hizo todo lo contrario a lo que dice aquel refrán
de que “amistad no quita conocimiento”, pues él, si tenía algún
conocimiento de algo, allí mismo lo tiró al zafacón.
Otro “defensor de la bomba”, quien es abogado, dejó muy mal
parado a este sector profesional, pues también por defender a un amigo
(¿político?), se llevó de bruces las leyes y el debido proceso, pues no
le importó mentir para decir que la Ley 317-72, que se refiere a la
instalación de bombas de combustibles, había sido derogada por la Ley
64-00 referida al Medio Ambiente y Recursos Naturales.
Al parecer este dilecto abogado no sabe que la Ley 64-00 lo que
hace es aumentar las sanciones a aquellas empresas o personas que
afectan al medio ambiente y los espacios públicos; llevando la multa
hasta diez mil salarios mínimos y desde 6 meses a 3 años de prisión.
Sanciones que en la Ley 317-72 solo llegaban de 100 a 500 pesos y de 2 a
6 meses de prisión.
Por último, “otro amigo”, quien es doctor en medicina, al
defender la bomba dijo que debemos apoyar las inversiones de la
generación joven, pues eso ayuda a que esos jóvenes deseen trabajar y
que así esa generación puede tener mayor disposición para venir a
invertir, por lo que no debemos oponernos. A este amigo se le olvidó que
lo primero que debe hacer un inversionista joven es asesorarse de la
factibilidad de una empresa y eso pasa por lo financiero, lo social, lo
ambiental, lo legal, ordenamiento territorial, etc., etc. De esta
manera, el inversionista joven no fracasará y concitará el apoyo de
todos.
Mis amigos les digo que si yo fuera el promotor de la bomba,
les aseguro que estaría muy preocupado, pues si estos amigos, con estos
argumentos son mis defensores, yo prefiero mejor tener enemigos.
Volvemos con el mismo tema.